A continuación, obras de Pablo Pakciarz, en su muestra en el E.C. Adán BuenosAyres.
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Se disculpa el fotógrafo por, potencialmente, en la apreciación de las fotos, no lograr captar el color, la textura o la esencia de las obras realizadas por el Artista. Y, sobre todo, por involuntariamente caer en la adictiva tendencia a la subexposición, con el posterior pseudo orgullo de no retocar digitalmente, algo que es consecuencia del novelismo... ¿Cuánto tiempo más llevará?, cantaría Lebón, en su tiempo... - Charly, más adelante, cantará: Víctima de soledad, víctima de un mal extraño, mi corazón se ha partido en dos
- Díganle al fotógrafo que muestre las fotos y haga silencio, por favor.
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"El marco es centrípeto, la pantalla centrífuga."
"(…) la pantalla destruye radicalmente el espacio pictórico."
. Por qué la pintura como medio artístico expresivo.
Es casi tan difícil de explicar como fácil, ¿no? La parte fácil es que casi naturalmente lo hago, primero el dibujo, luego la pintura… Sigue siendo el dibujo el medio en el que naturalmente fui yendo, es sencillo desde ese lado contestar. Ahora la parte complicada es el porqué de eso, ¿no? Por qué elegí yo la pintura como medio expresivo o porque también la pintura me atrapó o eligió en eso. Fue naturalmente. La verdad que nunca se me ocurrió hacer otra cosa. Nunca se me ocurrió llevarlo por el lado musical o escrito, no me surge. Y eso que soy muy malo en esas artes, pero nunca quise hacerlo tampoco. Quizá la respuesta al porqué es porque lo quería hacer, porque me entretenía, porque fue divertido. supongo que hay una parte de quien te avala en esas cosas. Cuando uno empieza a hacerlo ves que hay un aval en ese área y uno sigue por ahí. Nunca lo quise dejar y nunca me surgió hacer otra cosa. La pintura fue quizás lo que le siguió al dibujo, no sé, es como te digo, casi natural, orgánico, como se fue desarrollando este medio en el que me estoy moviendo.
. Qué dispara a retratar ciertas situaciones; inspiración para pintar, referencias.
Eso va mutando, cambiando… Uno a veces tiene proyectos que surgen de inspiraciones, va mutando y encontrando vetas en donde le gusta ir, o qué surge de eso, porque también es todo muy azaroso, uno se pone a hacer algo, le gusta eso, va por esa línea y se ramifica, y es así, como también un poco la vida, los proyectos que uno hace. Porque, en realidad, en última instancia, lo importante es el camino, digamos, o el deseo, me parece que está ahí el motor, más en el deseo de las cosas que en haberlas conseguido. Me fui un poco de tema (...) En mi interior, tuve una etapa introspectiva pero también el contexto te define, lo que uno vive lo define por completo, me parece. En la última muestra, yo pensaba: ¿Qué estoy retratando? ¿Cuál es la situación? ¿Qué situación estoy queriendo hacer? Creo que todos esos (cuadros) son después de la pandemia, que fue un momento en donde todos nos agrupamos en casas, en amigos, en personas muy cercanas, en gente bastante íntima. El contacto que tenías era escaso con el resto del mundo. Creo que así surgió la primera exposición que tuve, Panorámica, donde retrataba a mis amigos, a mí mismo, muchos autorretratos… Fue casi lo primero que empecé a hacer en forma de pintura, mucho autorretrato en la adolescencia, una parte bien introspectiva, de autoconocimiento. Después, con esta primera muestra, empecé a mostrar un poco a mis amigos, a mis seres queridos, la familia, toda esta cuestión de las circunstancias que me definen. Y ahora, tengo que definir el nombre pero lo último que estoy haciendo son más que nada multitudes, bueno, justamente en un contexto bastante revuelto, ¿no? Me parece que, siempre desde una lógica y sin querer forzarlo, que tampoco tenga un mensaje bien directo… Me considero una persona política pero no es la idea que mi arte sea una contrarrevolución a lo que está sucediendo, sino, que es esto, que yo vivo lo que me ocurre. Lo que pienso ahora y lo que es mi día a día es ver esta circunstancia política, que de alguna manera me conmueve y me interpela para hacer esto, lo que estoy haciendo ahora, que también va mutando, como todo. Al principio, quería hacer que la gente se agrupe y terminen haciendo un montón de manifestaciones… Por como van sucediendo las cosas, cómo se van dando, cómo yo las puedo ir viendo y qué es lo que yo pienso del momento, qué es lo que reflexiono. En este momento es muy político lo que me surge, lo que ando pensando. Tengo un montón de cosas dando vueltas pero en lo primero que siempre estoy pensando y reflexionando es en la situación actual. No se si creo mucho en la inspiración, uno tiene proyectos a lo largo de toda su vida y los ejecuta de una manera u otra, tenes momentos de mayor concentración, de menor concentración… No sé qué tan de acuerdo estoy con la idea de inspiración ¿Qué es inspirarte? En un momento dado o en un limitado periodo de tiempo te surge algo que va más allá de lo que uno podría hacer en otro momento… No se, es raro, me es raro. Uno tiene que hacer. Se tiene que poner y hacer, tiene que practicar, y bueno, es eso. Esa es la búsqueda. Entonces, más que inspiración, le llamaría búsqueda, justamente.
. Búsqueda de la pintura como práctica.
La búsqueda es esa, el proyecto. Va mutando, por ejemplo, estuve mucho con el tema del color, la carga de pintura, y cómo mezclar colores. Y ahora, me cansé un poco y estoy más ilustrativo, digamos. Estoy dibujando más; últimamente estaba haciéndolo directamente con el pincel y en estos últimos dos cuadros arranque dibujando con lápiz. Uno va cambiando en todo lo que va haciendo y siempre está bueno tener un proyecto, no repetirse porque es aburrido, ¿no? También lo que quiero es divertirme, entretenerme, jugar, llorar, no sé, estar triste, estar contento… Me surge todo eso cuando pinto, y busco eso también, vivir a través de la pintura. Uno cuando empieza a ver lo que hizo, lo que estuvo haciendo y se va a otros años, también es como un recuerdo propio, como ver fotos, de alguna manera: el momento en el que estuviste haciendo eso. Casi que recuerdo todos los cuadros que hice, recuerdo el momento cuando lo veo, el momento de hacer, y qué estaba pensando, mis reflexiones… Igualmente empecé hace poco, quizá uno después de veinte, treinta años se olvida, pero cada cuadro tiene un montón de pensamientos dentro, alegrías, de frustraciones, unos más que otros. Hay algunos que salen como así, como papa frita, y hay cuadros que son frustración completa hasta que los terminas borrando casi por completo.
. Organización/ejecución de idea en un taller (relación maestro pintor).
Estoy yendo los jueves tres horas una vez por semana, y uno lleva el proyecto o lo que quiere. A veces solo pinté la última media hora… Hay un montón de libros de pintura para ver, ojear, charlas con tus compañeros, miras lo que hacen, hablás con el profesor… Es un lugar que tiene magia, es otra cosa. Las paredes están todas pintadas, llenas de color, hay mucho estímulo, hay gente pintando… Terminás pintando porque te estimula, de alguna manera. Uno empieza, y puede tener sus dudas, le podes consultar a Ariel, mi profesor. Él nunca dice qué hay que hacer, no mete mano en nada. Eso me gusta mucho, es una buena dirección de alguna manera, tu director. Y es difícil de explicar cómo sucede eso. Uno pinta, tiene su idea… Quizás Ariel cuando estás haciendo algo bastante figurativo te explica cómo tendría que estar alguna mano, o algún brazo, si se achica o se agranda… Y vos podes decidir dejarlo así. En cambio cuando estás haciendo algo más expresionista, se fija más en lo que necesita el cuadro, cuál es la composición de colores, la paleta; te da opciones que podes tomar. Es un guía.
. Tratamiento del uso del color.
La paleta está definida por los colores que comprás, eso primero que nada, y a medida que vos compras hay períodos de colores, y un poco porque compraste mucho de un color, empezó a gustarte y listo, usas ese; después compras otros. Hay una especie de economía de pintura en ese sentido. Conozco un pintor que tiene una serie blanco y negro porque no tenía plata para comprar otro color que blanco y negro. En un momento estaba bastante influenciado por los colores que usaba Ariel, medio estridentes. Cuando empecé él me regaló un naranja de cadmio muy fuerte, vivo, al principio jugaba con eso. Siempre termino jugando con los complementarios, me gustan mucho y son una manera sencilla de arrancar un cuadro, componerlo, yo juego mucho con la composición en mis cuadros, me gusta componerlos, dejar muchos espacios, no me gusta centrar tanto. Me gusta que tenga un flujo, una dirección, una composición, como te digo… Juego mucho con los complementarios, me gusta el naranja y el azul, el amarillo y el violeta, el verde y el rojo. Últimamente con estas cosas de manifestaciones empecé a usar mucho marrón, por una cuestión bien de la tierra, pensando en algo muy moldeable, arcilla, de tierra, de barro, que termina formando una cantidad de personas. Del barro venimos, al barro vamos… Empecé con eso, me gustaría algún día usar más celestes, verdes pasteles, rosas. En general, me quedo con algunos colores. A veces, en la paleta pongo dos, tres, los primarios, hago todo con los primarios y meto un naranja para completar. En general soy bastante escaso, uso paleta reducida, te limitas a eso, un poco podés jugar… Uno tiene azules y verdes, para hacer de complementario solamente naranjas.
. Referencias, influencias.
Me gusta mucho la música, bueno, a todo el mundo,¿no? Creo que soy muy malo para la música, malo para tocarla, escucharla… Me causa una fascinación tremenda, me parece algo tan inaccesible que no puedo creer que alguien pueda producir esa melodía, esa composición musical. Quiero, de alguna manera, llegar a eso. Me gusta mucho el rol social que tiene la música, uno va con un grupo de gente, y lo siente en el momento. Siento que todo eso no lo tiene la pintura, lo logró, por ejemplo, el cine, la animación incluso. Ese algo de compartir en el momento que se está gestionando, y hay algo de accesibilidad de la música. La pintura es más inaccesible, de museo, es difícil entrarle, nada que ver con la música que es super popular. No se si es una influencia, pero es una fascinación que tengo con la música. Me gusta muchísimo el teatro, la escenografía teatral me encanta, me gustan mucho esas composiciones que se generan en determinadas escenas. Las podrías pintar, son bien metafóricas y con escasos recursos, me gusta eso del teatro. En el cine, por ejemplo, uno filma en la casa a una persona tomando mate… En el teatro es una escenografía, pones elementos principales que generan esa sensación de estar en tu casa o tomarte unos mates en el living, y creo que tiene mucho que ver con la pintura, no pintar una persona en un sillón tomando mate y hacer cada detallecito del living, sino como los planos del sillón, una persona sentada, unos relieves, un mate y ya tenés lo que querías decir. Me gusta eso del teatro, que tiene esa limitación que lo enaltece.
De referencias pictóricas Klimt, Schiele me encantan, tienen un manejo del dibujo que es tremendo, de hecho Schiele tiene mucho de teatral en ese sentido. Me gusta mucho Picasso, me parece que es una persona que tuvo todo, el tipo pasó por todo, un Da Vinci moderno, nuevo. Lucien Freud me gusta mucho, un artista del re carajo, Kitaj también es impresionante las obras que tiene. Si vamos a argentinos, Berni obviamente, casi sin cuestionar, por la obra… La obra es él. Me gusta mucho Carlos Alonso, que fue el maestro de Ariel, no solo por eso, el tipo es lo más grande de argentina seguramente. Yo estoy hablando de quien tomo, a quien me gusta robarme, me gustan muchos otros pero no se si van con la linea que tengo, Machado me encanta, por ejemplo, pero yo no podría pintarlo, va por otro lado. Cezanne también, es impresionante el manejo del color que tiene. Tampoco estoy tan instruido, me encantaría aprender muchísimo más de personas, que hay un montón a quien no conozco, me siento limitado en ese estilo, con Ariel conocí mucha gente muy buena, que me gustó y tomé mucho de ellos, en el sentido que te nutre, te estimula.
. Opinión sobre pintura de estudio, aire libre.
Preguntas y elaboración de la nota por Manuel Smaniotto y Micaela Fuscaldo.